Las empresas modernas tienen éxito o fracasan en su capacidad para desarrollar, entregar y aprovechar el software.
Ya sea que uno esté analizando a los líderes del mercado o a las organizaciones de servicios financieros tradicionales por igual.
Por eso, necesitamos una inspección minuciosa revela que la adopción de capacidades modernas de desarrollo y entrega de software.
Estas 2 capacidades han permitido a estas organizaciones aumentar la productividad, lograr la eficiencia e impulsar la innovación.
Aceptar que el software allana el camino hacia una empresa moderna y aceptar con éxito esa realidad demuestran ser desafíos muy diferentes.
Muchas organizaciones más grandes buscan implementar los enfoques modernos de software que son celebrados por las empresas nativas digitales que alguna vez fueron más pequeñas.
Estas prácticas incluyen Agile (planificación y ejecución interactivas y centradas en el usuario), implementación continua (implementación de cada cambio en producción).
Además, tenemos que tener en cuenta los equipos de tamaño de dos pizzas (pequeños equipos enfocados en características y funcionalidades específicas) y mantras como “falla rápido y arregla cosas”.
Las empresas, sin embargo, enfrentan desafíos únicos desafíos en la implementación de estas prácticas de una manera que impulse de manera sostenible los resultados exitosos que buscan.
Las empresas tienen desafíos de escala y complejidad que superar. Estas organizaciones tienen múltiples líneas de negocios.
Esas organizaciones disponen de múltiples equipos que en cada una, aprovechan múltiples tecnologías coordinadas en múltiples grupos funcionales.
A menudo, necesitan alinearse para brindar una experiencia de usuario coherente e impulsar objetivos compartidos.
La escala y la complejidad dan como resultado una diversidad de equipos, herramientas y tecnologías.
Sin embargo, la raíz del problema no es la diversidad de la organización, sino la desconexión generalizada entre los equipos.
Las desconexiones entre el desarrollo y las operaciones, el liderazgo y los profesionales, y los equipos de front-end y back-end dan como resultado varios elementos.
Esos elementos son la ineficiencia, menor productividad, falta de innovación y, en última instancia, poca satisfacción del cliente.
La solución radica en conectar todas las fases del ciclo de vida de desarrollo y entrega de software para lograr un proceso compartido y fluido dentro de una vista unificada.
La mejor manera de conectar estas vistas históricamente dispares es centrarse en los cinco pilares de la automatización de la entrega de software: integración continua, entrega continua, orquestación de versiones, gestión de funciones y gestión del flujo de valor.